Zao Wou Ki, descendiente de una familia china importante, nace en Pekín en 1921. Desde la edad de los 10 años manifiesta un interés evidente por la literatura y la historia y un talento precoz ya que en esta época empieza a pintar y dibujar. Entre 1935 y 1941, es alumno de la Escuela de Bellas Artes de Hangzhou donde después de terminar los estudios le contratan de maestro auxiliar.
En 1941 participa a una primera exposición. En aquel período es influenciado por los pintores europeos, Picasso y Matisse, compartiendo también la visión de Cézanne.
En 1946, organiza una primera exposición de pinturas modernas chinas (Museo de Tchoung-King). Su primera exposición personal tiene lugar en Shangai en 1947.
Llega a París en 1948, aprende el francés, que muy pronto logra dominar.
El mismo día de su llegada a Paris se pasa la tarde en le Louvre.
Frecuenta el taller de Othon Friesz, conoce a Henri Michaux. Viaja por Europa. En 1941 el descubrimiento de Venecia determina su evolución del período figurativo a la abstracción. Este mismo año, cuando una exposición de su trabajo de grabador en Suiza, descubre la obra de Paul Klee que le impresiona fuertemente. Su trabajo se expone con frecuencia en París (Galería Pierre). A principios de los años 50, se organizan exposiciones de sus obras en Estados Unidos (Chicago, NuevaYork, Washington) en Suiza (Basileo, Lausanne) y en Londres. El gran cambio se manifiesta en su arte de pintor y grabador a partir del año 1953, cuando su escritura se hace totalmente imaginaria. Su obra gráfica, importante ya, se presenta el año siguiente en el Museum of Fine Arts de Cincinnati (Estados Unidos) en el marco de una retrospectiva.
En 1957-1958 da la vuelta al mundo con Pierre Soulages. Encuentra a pintores que se harán amigos suyos ; se siente atraído por la espontaneidad y la ingenuidad de la Nueva Escuela de Nueva York. Zao Wou Ki expone con frecuencia en Nueva York (Kootz Gallery), en Paris (Galerie de France).
En 1964 obtiene la nacionalidad francesa.
Entre los años 1965 y 1975, el artista se consagra esencialmente al grabado y deja de pintar durante dos años (1971-1973), afligido por la enfermedad y la muerte de su segunda esposa.
El centro Pompidou le reserva una sala entera en 1976 para su exposición “Accrochages III”. Tanto en museos como en galerías, en Francia y en el extranjero, siguen numerosas exposiciones, homenajes, retrospectivas de este artista, la última en Biarritz, donde, en 2005, se presentan sus pinturas.
Murió en Nyons (Suiza) en abril de 2013